Autor: J.Lluis de Argila.
Todo ciclo tiene un inicio, un desarrollo y un final, todo flujo tiene su reflujo, astrológicamente hablando corresponde al inicio de otro nuevo ciclo ya que el constante devenir de los planetas no tiene un final y si en cambio podemos hablar de continuidad o transformación en los elementos representados por cada planeta, este concepto de ciclos es, ciertamente antiguo e imperecedero, ya este concepto de ciclos fue observado por los viejos Caldeos tanto con los planetas en movimiento como para los eclipses a los que llamaban ciclos Saros cuyo significado no es otro que repetición en el antiguo idioma Babilónico.
Un ciclo es, una secuencia de una repetición y podría interpretarse como el recorrido que realiza un planeta o cuerpo desde un punto determinado hasta el retorno al mismo punto después de dar una vuelta completa a la ronda Zodiacal.
Todo ciclo tiene un inicio, un desarrollo y un final, todo flujo tiene su reflujo, astrológicamente hablando corresponde al inicio de otro nuevo ciclo ya que el constante devenir de los planetas no tiene un final y si en cambio podemos hablar de continuidad o transformación en los elementos representados por cada planeta, este concepto de ciclos es, ciertamente antiguo e imperecedero, ya este concepto de ciclos fue observado por los viejos Caldeos tanto con los planetas en movimiento como para los eclipses a los que llamaban ciclos Saros cuyo significado no es otro que repetición en el antiguo idioma Babilónico.
Un ciclo es, una secuencia de una repetición y podría interpretarse como el recorrido que realiza un planeta o cuerpo desde un punto determinado hasta el retorno al mismo punto después de dar una vuelta completa a la ronda Zodiacal.
Los ciclos planetarios mas importantes son los que realizan los planetas denominados lentos, a saber: Plutón, Neptuno,
Urano, Saturno y Júpiter, son estos unos ciclos a los que habrá que llamar de retorno ya que cada planeta retorna a su punto de partida inicial mientras que a lo largo de su recorrido conectan o conjuncionan con otros planetas de distinta naturaleza formandose de esta manera nuevos ciclos dentro de otros ciclos que evocan un mecanismo de relojería donde cada planeta coincide e ínter- actúa con los demás en un momento dado.
Los ciclos de retorno de Urano Neptuno y Plutón escapan en tiempo a la vida humana y su análisis en esta a pesar de tener una gran validez en astrología mundial, escapan debido a su prolongación en el tiempo a la duración de una vida humana, el retorno Uraniano se da a los 84, Neptuno tarda 146 años y el mismo Plutón necesitará 248...
Urano, Saturno y Júpiter, son estos unos ciclos a los que habrá que llamar de retorno ya que cada planeta retorna a su punto de partida inicial mientras que a lo largo de su recorrido conectan o conjuncionan con otros planetas de distinta naturaleza formandose de esta manera nuevos ciclos dentro de otros ciclos que evocan un mecanismo de relojería donde cada planeta coincide e ínter- actúa con los demás en un momento dado.
Los ciclos de retorno de Urano Neptuno y Plutón escapan en tiempo a la vida humana y su análisis en esta a pesar de tener una gran validez en astrología mundial, escapan debido a su prolongación en el tiempo a la duración de una vida humana, el retorno Uraniano se da a los 84, Neptuno tarda 146 años y el mismo Plutón necesitará 248...
Sin embargo los retornos cíclicos de Júpiter, Saturno e incluso el mismo Urano tienen una importancia primordial en cada existencia y son ciclos más fácilmente analizables en la existencia de una persona.
El retorno de Júpiter.
Este planeta tarda aproximadamente unos 12 años en dar una vuelta completa a la ronda del zodíaco y a pesar de mantenerse durante poco tiempo en su lugar de retorno, poco mas de una semana, su influencia se mantiene durante mucho tiempo, prácticamente un año, que, además no pasará inadvertido ya que este retorno anuncia avances importantes en la existencia cuando se produce, este es un ciclo que se dará a los 12, 24, 36, 48, 60, etc, cada doce años aproximadamente y dependiendo de sus marchas directas y retrógradas.
El retorno de Júpiter.
Este planeta tarda aproximadamente unos 12 años en dar una vuelta completa a la ronda del zodíaco y a pesar de mantenerse durante poco tiempo en su lugar de retorno, poco mas de una semana, su influencia se mantiene durante mucho tiempo, prácticamente un año, que, además no pasará inadvertido ya que este retorno anuncia avances importantes en la existencia cuando se produce, este es un ciclo que se dará a los 12, 24, 36, 48, 60, etc, cada doce años aproximadamente y dependiendo de sus marchas directas y retrógradas.
En todo caso anuncia beneficios que bien aprovechados repercutiran muy favorablemente.
El retorno de Saturno.
Saturno tarda aproximadamente unos 29 años y medio en dar una vuelta completa por lo que viviremos sus retornos a los 30, 60, y 90 años, este planeta representa una influencia lenta y perseverante que nos llevará a tomar decisiones y provocar cambios en nuestra existencia a pesar de no resultar una influencia nada cómoda de ser vivida ya que en muchas personas iniciará procesos dificiles de concretización en ocasiones a través de algunas duras pruebas del destino, en todo caso nos impulsará a avanzar concretando y estableciendo bases estables para el futur, ello ocurre con mas intensidad a partir del segundo retorno, allá por los 60 cuando su influencia nuestros actos, ya mas reposados tienden a buscar nuevas inquietudes mas acordes con el momento existencial aunque este segundo paso no estará exento de preocupaciones, especialmente en aquellas personas que sientan que ya no les queda nada por hacer.
El retorno de Urano.
Vivir un ciclo de retorno de Urano puede decirse que tiene ya su mérito ya que este planeta tarda unos 84 años en dar una vuelta completa a la ronda del zodiaco y tarda siete años en recorren cada uno de los signos, sin embargo ya en la mitad de su recorrido, cuando a 180 grados de su posición inicial queda opuesto a su radical, recibimos una importante influencia que se manifestará en etapas de cambios importantes en la existencia, suele promover una buena dosis de tensiones pero también proporciona una buena dosis de energía que bien encauzada resulta de gran ayuda para esa época de la existencia, urano abrirá nuevos horizontes incluso a aquellos que puedan conocer su verdadero retorno alrededor de los 84 años de edad.
Estos son los ciclos básicos que forman los planetas de movimiento lento y sus influencias mas generales aunque en muchas ocasiones susceptibles de cambiar nuestra existencia.
El retorno de Saturno.
Saturno tarda aproximadamente unos 29 años y medio en dar una vuelta completa por lo que viviremos sus retornos a los 30, 60, y 90 años, este planeta representa una influencia lenta y perseverante que nos llevará a tomar decisiones y provocar cambios en nuestra existencia a pesar de no resultar una influencia nada cómoda de ser vivida ya que en muchas personas iniciará procesos dificiles de concretización en ocasiones a través de algunas duras pruebas del destino, en todo caso nos impulsará a avanzar concretando y estableciendo bases estables para el futur, ello ocurre con mas intensidad a partir del segundo retorno, allá por los 60 cuando su influencia nuestros actos, ya mas reposados tienden a buscar nuevas inquietudes mas acordes con el momento existencial aunque este segundo paso no estará exento de preocupaciones, especialmente en aquellas personas que sientan que ya no les queda nada por hacer.
El retorno de Urano.
Vivir un ciclo de retorno de Urano puede decirse que tiene ya su mérito ya que este planeta tarda unos 84 años en dar una vuelta completa a la ronda del zodiaco y tarda siete años en recorren cada uno de los signos, sin embargo ya en la mitad de su recorrido, cuando a 180 grados de su posición inicial queda opuesto a su radical, recibimos una importante influencia que se manifestará en etapas de cambios importantes en la existencia, suele promover una buena dosis de tensiones pero también proporciona una buena dosis de energía que bien encauzada resulta de gran ayuda para esa época de la existencia, urano abrirá nuevos horizontes incluso a aquellos que puedan conocer su verdadero retorno alrededor de los 84 años de edad.
Estos son los ciclos básicos que forman los planetas de movimiento lento y sus influencias mas generales aunque en muchas ocasiones susceptibles de cambiar nuestra existencia.
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