Boris Cristoff, Montevideo.
El horizonte circular une cielo y Tierra, símbolo del horóscopo.
Dios no juega a los dados pero cómo nos marea ¡!
Para predecir los antiguos lo hacían directamente de los cielos, pero desde la cultura griega eso no es necesario porque se conocen los movimientos de planetas y signos con mucha anticipación con el Horóscopo.
Este término del griego oroskopos, palabra compuesta por SKOPEO (observar) y HORA. En suma es observar la hora natal, que es el dato más preciso para comprender el destino presente, futuro y pasado.
UN HORÓSCOPO MODERNO
El horóscopo es el mapa más sencillo de la relación celeste- terretre.
El siguiente horóscopo de Jesús nos ayuda a entender cómo es su mapa natal.
Abajo en el dibujo a la derecha, hay 7 puntos que indican los nombres de los 7 circuitos del horóscopo:
1- El interior del horóscopo es donde se trazan los ángulos selectos entre planetas : 0º, 60º, 90º, 120º, 180º.
2- La 1ª corona es una regla graduada de 360º, que es la longitud total del horóscopo.
3- La 2ª corona es la regla numerada de 10º en 10º que facilita la lectura de la 1ª corona.
4- La 3ª corona son los grados en que están los planetas.
5- La 4ª corona es el espacio donde se dibujan los diez planetas al nacer Jesús.
6- La 5º corona es la rueda zodiacal donde se trazan LAS 12 DIVISIONES DEL CIELO llamados signos.
7- Desde el interior hasta el exterior se trazan en forma radial LAS 12 DIVISIONES DE LA TIERRA o casas.
El horóscopo o mapa natal consiste en dos esferas superpuestas, una esfera representa a la bóveda celeste y la otra es la Tierra.
Ambas se nos aparecen como dos esferas, que en el papel se expresa como un solo círculo. Los griegos tuvieron el privilegio de representar cielo y tierra encimados, facilitando así la relación íntima entre símbolos celestes y sucesos terrestres.
En esta carta el Ascendente, de donde comienzan a datarse los años está arriba a la derecha. El mediocielo está abajo a la derecha.
La esfera a la izquierda tiene 12 signos zodiacales alrededor de la Tierra.
La otra esfera es la Tierra dividida en 12 casas como gajos de naranja.
Ambas se consideran como una sola en forma de círculo, cuyas 12 características son análogas, pero cada una referida a distintos temas: los signos indican el carácter básico de cada nativo y las casas el destino en edades septenales.
Cada signo marca el carácter básico de un nativo: Aries es individualismo creativo, Tauro es materialismo fijo, Géminis de relacionismo maleable, Cáncer es humanismo creativo, etc.
En cambio, cada casa marca el destino fijo para cada edad septenal: De 0 a 7 años en casa I es la infancia, de 7 a 14 años en casa II es la escolaridad, de 14 a 21 años en casa III es la adolescencia, de 21 a 28 años en casa IV es la sexualidad, etc.
HORÓSCOPOS ANTIGUOS
Tanto el hombre prehistórico como el actual, al observar el horizonte, queda paralizado por el mágico contraste entre el infinito espacio celeste y nuestro limitado planeta terrestre. Ese fenomenal cambio de la realidad entre uno y otro no puede más que decirnos que existen fuerzas mucho más poderosas, donde se originan nuestros destinos.
Dando un salto hacia el pasado, los astrólogos griegos crearon el horóscopo, exacta imagen de la realidad.
El horizonte es un círculo con el hombre en el centro.
De día se aprecia el círculo de la Tierra y de noche el círculo de la bóveda celeste.
El horóscopo circular es la representación de esa imagen del hombre en el centro del círculo donde se unen cielo y tierra.
Colocado un hombre en pleno océano o en una tierra llana sin árboles ni obstáculos, se ve rodeado de un círculo que límita dos grandes ambientes contiguos, el círculo de la bóveda celeste que se alza por encima de su cabeza y el círculo del horizonte terrestre que pisan sus piés.
Esa imagen del círculo que une el espacio celeste en lo alto y el horizonte terrestre se representó por el círculo zodiacal llamado horóscopo.
Horóscopos trazados por Galileo, Horóscopo caldeo de hace 6.000 años y los 12 signos de hace 12.000 años,
Ese círculo se dividió en doce partes.
Si se refiere al círculo de la bóveda celeste se llamaron signos xodiacales: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, etc.
Pero si se refiere al círculo del horizonte terrestre se llamaron casas: I, II, III, IV, etc. Los signos indican el carácter básico de las personas al nacer y las casas indican los caracteres inevitables de doce edades septenales de su destino, las que nadie puede eludir: infancia, escolaridad, adolescencia, sexualidad, paternalismo, servicio, colectivismo, relevo generacional, mundanismo, pasividad, integración, aislamiento.