HABILIDADES PARAPSICOLÓGICAS EN LOS NIÑOS INDIGOS
Autora: Isabel Stelling
(PARTE II)
Hoy en día los descubrimientos de la Mecánica Cuántica han ido desentrañando misterios para ese gran acercamiento predicho en el pasado de que la Era de Acuario uniría la ciencia y el espíritu.
Cuando hablamos de percepción extra-sensorial nos referimos a la habilidad de percibir información por medios distintos a los cinco sentidos conocidos tradicionalmente. Pero también engloba el ejecutar hechos que violen las conocidas leyes físicas por las cuales fueron distinguidos maestros de la antigüedad, muchos de ellos mencionados en la Biblia.
¿Será que el ser humano dispone de otros sentidos no determinados científicamente o que no son evidentes? Los rangos de percepción de los sentidos conocidos son variables de un individuo a otro. Si nos referimos a la facultad de escuchar, en el caso de un piano vemos que tiene distintas escalas. Pero existen sonidos que extrapolan el intervalo normal de percepción y que no son percibidos por el oído normal, pero si por la mayoría de los animales, los cuales a su vez poseen un sentido del olfato y de la vista muy desarrollado. Una vista perfecta y sana capta los más lejano y lo más cercano con mucha precisión pero dentro de un intervalo determinado. Pero los gatos y los perros parecen ver lo que el hombre común no puede hacer. Hoy contamos con telescopios y microscopios cada vez más modernos que nos acercan al macromundo y al micromundo y que en el pasado, como no sabíamos cómo hacerlo, negábamos la existencia de dichos mundos.
La mayoría de los nuevos niños gozan, desde muy pequeños, de sentidos más desarrollados que el hombre común. Podemos inferir que estos niños índigo, superhombres del mañana, lleguen a tener una vista, olfato y oídos de carácter biónico y captar sensaciones a través de su piel y de su tacto.
Se conoce que algunos niños en China pueden leer un papel escrito cuando lo colocan en su oído o con sólo tocarlo. También logran leer escritos que están fuera de su alcance inmediato.
Partiendo de la premisa de que los niños de hoy en día son seres que disfrutan de otros dones y habilidades que el hombre común no posee, es viable inferir que ellos disponen de órganos adecuados para captar los subundos y esa es la razón por la que ven seres de otras dimensiones y también el aura de los seres vivos.
Entre las más conocidas habilidades extra-sensoriales tenemos la telepatía, que es la habilidad de leer la mente de otras personas y de comunicarse con ella por transferencia de pensamientos, no importa en qué lugar se encuentre.
La clarividencia, definida como la aptitud de acceder a un conocimiento que nadie posee a través de las llamadas mancias o sin ellas.
La persona puede ver el aura humana y de los animales y plantas.
También es capaz de ver sucesos del futuro y hasta cambiar, con su intención, el curso de los acontecimientos. A esta facultad se le llama precognición.
Ver los eventos pasados se le llama retrocognición. Se conoce de algunos individuos que pareciera que tuviesen Rayos X en sus ojos y pueden ver el interior de un cuerpo humano y detectar anomalías.
Al principio no saben lo que les ocurre, pero luego aprenden el código y pueden hacer diagnósticos muy certeros.
La clariaudiencia consiste en escuchar voces provenientes de lugares remotos y a veces desconocidos.
Un caso histórico fue el de Juana de Arco.
CONTINUARÁ...
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